En ocasiones en los edificios se sitúan unos estrechos patios “patinillos”, por los que discurren las instalaciones y en los que existen igualmente ventanas de ventilación.

El acceso a estos lugares es angosto y muy dificultoso para instalar una estructura de andamiaje. Además el elevado coste de estas estructuras suele ser motivo de retraso en la toma de decisiones a la hora de planificar labores de mantenimiento y rehabilitación.

Por ello, el empleo de las técnicas verticales es el más adecuado para acometer acciones de reparación como rehabilitaciones integrales.

Repintar un patio de este tipo, además de suponer una mejora en limpieza, aporta mayor luminosidad a través de las ventanas que en él se sitúan.

En la imagen destacada podemos ver un equipo de amiantonor, realizando labores de pintado en el patinillo de un edificio de Errekalde Larraskitu errepidea de Bilbao.